29-03-2020
Carta de
una Gerocultora (Auxiliar de Enfermería)
Hoy tal
vez no es mi mejor día, tal vez solo sea eso.
Pero cada
día que pasa me siento más impotente, más perdedora, pero no vencida.
Rabia de
ver como los amos y dueños de la gestión de la dependencia, nuevamente están
demostrando estar muy unidos y con un propósito muy firme, que esta crisis no
les haga perder su nivel adquisitivo.
Que se
van nuestros mayores, no importa, tenemos muchos en la reserva.
No se
preocuparon en abastecerse de material para prevenir posibles casos de
COVID-19, o si lo hicieron lo tienen bien guardado.
Van a
resistir, van a esperar que la administración, el gobierno central, quien sea,
tengan la delicadeza de dar algún tipo de material de protección.
El
objetivo no es mantener vidas, el objetivo es no perder dinero.
Desde CCOO, siempre me han inculcado, como delegada, de que la prevención salva vidas.
Ingenua
yo, pensé que ahora si lo iba a conseguir, que ahora era evidente el riesgo que
tenemos en los centros y conseguiría una buena protección para mis compañeras y
residentes.
He
fallado, a día de hoy no he conseguido nada, todo lo contrario, se me trata de
alarmista por pedir material, me dicen que todo esta bien que no pasa nada…
Una
subida de fiebre, una tos me pone en alerta…me preocupa…transmito mi
preocupación, pero entra dentro de la normalidad me dicen, son mayores.
A cambio
si preocupa la falta de personal, bueno ahora se dejan ver los fines de semana,
tal vez se quieren subir al carro para recibir también halagos del exterior o
para mostrar que ellos también trabajan sin protección y no pasa nada.
Como
cuando íbamos de pequeños al circo y deseábamos
ver como el domador domaba a los leones con su látigo y conseguía
convencerlos de quien mandaba y como cuando levantarse o saltar.
Si esta
puede ser la sensación que puedo tener en estos momentos, ser parte de un
espectáculo, que desde fuera te ven como un héroe, pero desde dentro te sientes
impotente…
UNA LEONA
